- ¿Quién es Alfonso Vargas?
Un servidor público que a lo que aspira es a ser lo más útil posible a la sociedad desde su tarea docente, de estudio e investigación. A lo largo de los años he aprendido a distinguir dos tipos de personas: las que van a servir y las que van a servirse. Las del segundo grupo no me interesan; prefiero siempre a las del primero; aunque podamos no coincidir en el cómo, coincidiremos en el qué.
- ¿Categoría que ocupa en la Universidad?
Catedrático de Universidad en el área de conocimiento de Organización de Empresas e Investigador Principal del Grupo de Investigación en Turismo de la UHU (GEIDETUR).
- ¿Desde cuándo pertenece a la Universidad de Huelva?
Desde su creación. Soy de aquellos "históricos" de las llamadas entonces Extensiones Universitarias de la Universidad de Sevilla, germen de lo que luego fue el movimiento del 3 de marzo de 1988, lo que implica algunos años más en el "zurrón". A partir de ahí, he pasado por casi todas las categorías y puestos por los que se puede pasar en una universidad, lo que me permite tener las ideas fundamentales bastante claras.
- Líneas de investigación principales.
La definición de una nueva teoría estratégica que dé mejores respuestas a los desafíos del siglo XXI y la gestión de empresas y destinos turísticos, tomando especial relevancia el turismo industrial, la innovación y el que suele ser el eslabón perdido en los procesos de planificación turística: los residentes, las comunidades locales.
Ahora lo que más me interesa y busco es lograr una mayor imbricación con el tejido empresarial, en especial el vinculado al turismo. No podemos estar aislados en nuestra burbuja académica. Hay que trabajar colaborativamente para configurar destinos turísticos inteligentes.
- ¿Las Universidades pueden hacer algo más por incrementar la llegada de turistas a sus respectivos enclaves?
Sí, poniendo en juego ordenadamente los recursos humanos con los que cuenta con una trayectoria investigadora acreditada en la materia, desde disciplinas diversas: el turismo es un campo de estudio que requiere de la aportación de especialistas en áreas muy diferentes pero que convergen en él. La Universidad de Huelva tiene que dar definitivamente el paso para crear un Centro de Estrategia Turística que añada valor a los agentes públicos y privados del sector. La iniciativa ha de ser nuestra.
- ¿Cuáles son los principales problemas para que la provincia de Huelva no sea una potencia turística?
La respuesta fácil y tópica es responder aludiendo a las endémicas carencias de transportes y comunicaciones (aeropuerto, AVE, etc.). Pero esto, con ser evidente, no es suficiente, y se ha convertido en un parapeto para no hacer otras cosas que sí están en nuestras manos y son también necesarias. El sector turístico necesita, antes que nada, definir el modelo de desarrollo al que aspira y, paralelamente, organizarse en estructuras que trasciendan la promoción. Hemos de pasar de un ente para la promoción del destino a un ente para la gestión del destino, que implica muchas más cosas. Por un lado hay que saber qué promocionar, de forma más segmentada, y luego hay que asegurarse de que el turista no ve defraudada sus expectativas, y eso requiere gestionar (planificar, coordinar) el complejo mosaico de agentes públicos y privados que intervienen en la experiencia turística. Adicionalmente, la marca que nos identifica, "Huelva la Luz" debe desarrollar su potencial, y a veces parece que tiende a diluirse. Sería un gravísimo error. Debe ser la marca de todos y para todos. Debería estar hasta en la sopa.
- ¿La ciudad y sus instituciones hacen mucho por mejorarlo?
La ciudad de Huelva tiene recursos turísticos más limitados, con menor capacidad de atracción, pero está haciendo un esfuerzo por poner en valor sus potencialidades. Por ejemplo, es un buen enclave para recorrer cómodamente casi toda la provincia, y cuenta con una oferta gastronómica cada vez más variada y mejor. De cualquier modo, el turismo en la capital se ve muy condicionado por los flujos turísticos de la costa. La capital se beneficia del turismo de sol y playa, fundamentalmente. Y también podría despuntar en el turismo de congresos, con mejores comunicaciones.
- ¿Qué es para ti Huelva?
El lugar donde nací y donde tengo mis raíces, como las de mis padres. Dicho esto, mi discurso no es el del onubensismo vacuo que sólo se mira a si mismo y sólo conduce al inmovilismo. Hemos de mirar mucho más hacia fuera, ser autocríticos y darnos cuenta de que, aún poseyendo grandes valores de los que hemos de sentirnos orgullosos, tenemos aún muchísimo camino por recorrer. Huelva es todavía una sociedad poco viajada, no suficientemente abierta, aunque felizmente las nuevas generaciones van a cambiar esto, si somos capaces de crear oportunidades para que vuelquen aquí todo su talento y no tengan que emigrar. Siempre he pensado que la Universidad será el gran motor del cambio a medio/largo plazo, sobre todo en las maneras de pensar y de ver la realidad, con mucha más amplitud. Ya es hora de dejar de ser la tierra de las potencialidades para convertirse en la tierra de las realidades. La renovación es imprescindible.
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